¿Cómo utilizo mejor mí tiempo?

Aunque para muchas personas trabajar desde el hogar representa una ventaja, sin duda atrae ciertos desafíos. Los mismos pueden variar desde mantener tu área de trabajo en orden, ser responsable con el tiempo necesario para cumplir tus proyectos y hasta separar tiempo para mantener tu casa en óptimas condiciones de manera que puedas recibir clientes en un ambiente apropiado.

En mi in-experiencia como empresaria debo admitir que me topé con estos y otros desafíos. Sin embargo, con el tiempo aprendí que soy más productiva si practico lo siguiente:

1. Organiza tu área de trabajo – Por lo general la noche antes organizo mi taller de costura y separo los proyectos pendientes según la fecha de entrega. Esto me ayuda a aprovechar mejor mí tiempo al día siguiente.
2. Vestimenta apropiada – Aunque quedarme en pijama puede ser tentador; prefiero vestirme con la idea de que puedo recibir un cliente en cualquier momento. Incluso estoy trabajando unas camisas con los colores de mi marca para utilizarlo como uniforme.
3. Prepara tus comidas – En la mañana es súper importante el desayuno para recuperar energía. Igualmente respetar tu horario para almuerzo o cena. En mi caso suelo enfocarme mucho en los proyectos y se me olvida comer, para eso utilizo una alarma como recordatorio.
4. Confirma tus citas – Cuando confirmas tus clientes distribuyes mejor tu tiempo, además envía el mensaje que respetas tu trabajo.
5. Respeta tu horario de servicio – Establece un horario y cumple con él. Si deseas puedes hacer excepciones pero no acostumbres al cliente. Me sirve de guía pensar qué tipo de flexibilidad le ofrecería una empresa multinacional ante la misma situación. Esto realmente me ayuda a ser flexible cuando es razonable o discernir los caprichos que pueda tener el cliente.
6. Valora tu trabajo – Tu trabajo es importante, requiere de tu inversión, dedicación y esfuerzo; por consiguiente sé justo y constante con tus precios. Un consejo que atesoro es, que es preferible rechazar un trabajo a esforzarte y no ver los frutos del mismo.

¡Después de todo es tú tiempo y como jefe tú decides cuánto vale!

Cumplir con cada uno de estos puntos ha sido pieza clave en el desarrollo y crecimiento de mi negocio. En mi caso mi interés es proyectar profesionalismo ofreciéndoles a mis clientes un trabajo de calidad y un servicio impecable. ¡Recuerda que tú desempeño es tú mejor carta de presentación y la imagen de tú empresa!

Te invito a estudiar estos puntos en términos de tú empresa y crear tú propia lista de criterios. Cuando escojas tus criterios toma en cuenta que tipo de experiencia deseas que tu cliente experimente y recuerda ser constante. De ser necesario no tengas miedo en hacer ajustes, recuerda que siempre existe espacio para mejorar.

Piensa que hoy puede ser el primer día del resto de tu vida empresarial. ¡Te auguro mucho éxito en lo todo lo que emprendas!